Pregonero: D. Alberto Arrebola Ruiz

alberto¡Buenas noches ¡ Autoridades, componentes de la Junta de Festejos, vecinos, amigos y en general asistentes a este acto.

En primer lugar quisiera agradecer a la Junta de Festejos el honor que me concede al nombrarme pregonero de las fiestas de este año.

Cuando me pidieron que realizara este pregón estuve en duda si aceptar o no. Esta duda se basaba en la cuestión de ¿Que había hecho yo para ser merecedor de este honor? 17 años de dedicación a la docencia en este noble pueblo, puede que sean suficientes para justificarlo, pero necesitaba algo más; algo que me uniese con más intensidad al pueblo y aplacase mi conciencia. Recordé en conversaciones con “mis mayores”, que me decían que mi bisabuelo paterno procedía de Arenas-Daimalos, lo cual parece cierto. Además, los 17 años de labor profesional en el pueblo, ha conseguido hacerme sentir Arenusco por apego. Por lo tanto puedo decir que soy Arenusco por apego y por derecho. ¡Tenía las justificaciones necesarias para proseguir en esta tarea de pregonero!

Se me planteaba el segundo conflicto ¿Como iniciar este pregón y que decir? Comencé por buscar en el diccionario de la Real Academia de la Lengua y decía al respecto: Pregón es un“Discurso elogioso en que se anuncia al público la celebración de una festividad y se le incita a participar en ella.” Dado que además se me había aconsejado brevedad y que soy simpatizante de la idea de Santa Teresa de “Lo bueno, si breve, dos veces bueno”. La cosa se me planteaba fácil, ¡El pregón estaba hecho! Tan fácil como decir ¡VIVA ARENAS! QUE COMIENCE LA FIESTA Y A DIVERTIRSE!

Pero Arenas y su gente se merecían mayor esfuerzo de mi sesera, estaba pues en un aprieto. Me acorde entonces de un episodio de nuestra literatura del Siglo de Oro. En el que Violante intentaba poner a prueba el genio de Lope de Vega, pidiéndole que improvisara unos versos para un soneto. Intente emularlo diciendo:

– Un pregón me mandan hacer en un instante

en mi vida me he visto en tal aprieto

realizar un pregón elegante

corto, bonito y discreto.

– Cantar la belleza de las mujeres de Arenas

tarea fácil, pues bellas son, pero merece la pena

– Elogiar los paisajes y colores de esta Tierra

no lo hago, solo hay que mirar las pinturas de Evaristo Guerra

– Narrar las grandezas de su Historia y Arte Mudéjar

Mejor contemplar esas torres-alminares, tan viejas…

No prosigo por este camino y dado que la calidad de estos versos, deja mucho que desear y está claro que mi pregón ha de encaminarse por otros derroteros.

Estuve tentado de recurrir a contar y cantar las grandezas de su Historia o hablaros del topónimo de Arenas. Pero si de verdad he de realizar un elogio al pueblo e invitaros a participar en la fiesta, permitidme que hable de cómo veo y siento a su gente y que lo haga dando una clase ficticia de Ciencias Sociales, ¡Al fin y al cabo soy un maestro que imparte esta materia!

Voy a explicaros de donde procede el nombre de este pueblo, ARENAS. Para ello debéis conocer dos conceptos, son los siguientes:

Toponimia es: “Estudio del origen y significación de los nombres propios de lugar”, y Topónimo, es por tanto el Nombre propio de un lugar.

En mis “cábalas e investigaciones” he llegado a la conclusión de que el nombre de Arenas, es en realidad una palabra formada por unas siglas. Cada una de las letras que la componen son, sin lugar a dudas, las iniciales de un conjunto de adjetivos del castellano, que denotan una serie de valores que desgraciadamente, hoy, están en desuso.

Veamos de donde provienen y que significan cada una de las letras que componen el topónimo “Arenas”:

A- 1ª “A” de Amables. Cualquiera que venga al pueblo, podrá comprobar que será recibido con una sonrisa, un saludo o un “ratito” de conversación.

R- “R” de Razonables. Es fácil discutir con los arenuscos, pero más fácil es llegar a un acuerdo, siembre y cuando la verdad vaya por delante y por derecho. Somos gente sencilla pero no tonta. ¡Hay de aquel, que no tenga clara esta idea!

E- “E” de Espléndidos. En lo material, gente desprendida. Si hay
que compartir, se comparte; si hay que aportar, se aporta y si hay
que colaborar con el trabajo y esfuerzo, se colabora.

N- “N” de Nobles. Nobles de corazón. Gente a la que le cuesta abrir
sus sentimientos, pero que cuando lo hacen se entregan, en cuerpo
y alma. Sin pedir explicaciones, ni nada a cambio, ¡De corazón!

A- 2ª “A” de Alegres. Animosos, distendidos, sin complejos, con la tranquilidad y alegría que da el poder entregarse a la fiesta con el deber cumplido. Y con el valor añadido de querer compartir esta alegría con los demás.

S- “S” de Sociables. Nadie que venga con buenos sentimientos será considerado extraño. Da igual procedencia, raza o religión. El pueblo esta abierto a todos, solo hay que querer entrar con respeto. De la integración del visitante ya se encargan los arenuscos.

Así es como percibo al pueblo de Arenas. Y tal como lo veo y lo siento, lo pregono.

Para finalizar y atendiendo a los dos últimos adjetivos de mi exposición, alegres y sociables, solo que me queda decir que los pongamos en práctica todo el año pero, especialmente, en estos días de fiesta. ¡Como maestro os impongo esta tarea para la casa y calle y si no es como tarea, lo hago como castigo.

Gracias por vuestra atención y ahora sí…

¡VIVA ARENAS Y QUE COMIENCE LA FERIA!